Un movimiento político, social y económico que ha generado mucha polémica es el socialismo, principalmente al oponerse a las ideas capitalistas. Descubre en este post todo lo relacionado a este sector cuya sociedad es capaz de controlar todos los medios de producción para garantizar el bienestar de todos los ciudadanos.
Historia del socialismo
El término “socialismo” fue utilizado por primera vez gracias a un clérigo de origen italiano llamado Ferdinando Faccinei para constatar que el contrato social debía ser el eje que moviera toda una sociedad hasta alcanzar su bienestar. Appiano Buonafede estuvo de acuerdo con su significado, para darse a conocer 20 años más tarde.
Pierre Leroux en la Real Enciclopedia ofrece una definición que está más ajustada a la actualidad. En primer lugar, hace su propia contraposición de socialismo a lo que implica el individualismo, aceptando que este último concepto sostiene una mayor libertad sin límites. Para el socialismo, expuso que la sociedad demuestra una mayor preocupación para alcanzar su bienestar personal y colectivo, pero esto no sería lo único de relevancia.
El socialismo se ocupó siempre en recuperar la máxima idea conocida en la revolución francesa “liberté, égalité et fraternité” para que se aplicara en todas y cada una de las sociedades sin sacrificar mayores recursos. No obstante, Leroux también hace una crítica de este movimiento al asegurar que se demuestra un amor exagerado de la sociedad hacia sus semejantes.
Robert Owen, Henri de Saint-Simon y Louis Reybaud también ofrecieron cada uno de ellos su propio concepto sobre el socialismo, pues la mayoría de ellos se sintieron identificados con este movimiento. Otros movimientos económicos que han surgido desde tiempos antiguos es la capacidad de comercializar y tener un contacto más estrecho con los clientes. (ver: Historia del marketing).
10 años más tarde, después de establecerse los conceptos de socialismo y socialista, aparecen otros términos interesantes tales como comunista y comunismo. Los mismos tuvieron gran repercusión cuando Jean-Jacques Pillot y Étienne Cabet conmemoraron un gran banquete en que se darían cita alrededor de 1000 personas, gran parte de ellos se trataron de simples trabajadores. Cada uno de ellos fue tratado con absoluta igualdad por parte de los patrocinadores, para que se sintieran más a gusto con la reunión.
Gracias a Lorenz von Stein, la palabra comunismo empezó a resonar con más fuerza en una de sus publicaciones más famosas, El socialismo y el comunismo en la Francia de hoy, haciendo que otros intelectuales de la talla de Wilhelm Weitling y August Becker se apegaran a su concepto hasta hacerlo suyo.
Debido a la familiarización de ambos conceptos a causa de varios autores, muchas veces se confundieron los términos, pues engloban prácticamente la misma esencia, pero guarda distancias hasta notarse sus diferencias. Jean Bruhat ayudó bastante a aclarar ciertas dudas respecto a estos conceptos, al descifrar el comunismo como un proceso de conquistar al Estado gracias a la revolución con el propósito de hacer que el hombre sea y se sienta completamente libre.
La libertad del hombre no fue tan fácil de conseguir, en parte por la gran opresión económica y social que hicieron parte en distintos países. En contraparte, el socialismo si mantuvo una postura más radical en alcanzar los ideales de libertad, igualdad y fraternidad para mejorar una sociedad.
Friedrich Engels y Karl Marx se sintieron más cómodos implementando el concepto de comunismo, hasta el punto de crear la famosa Liga de Comunistas en 1847, considerando que la misma parte de una revolución de la clase obrera, pero los socialistas creyeron que dicha revolución se encontraba en la clase ilustrada.
El tiempo transcurría y el socialismo no se alejaba de las ideas socialistas, aunque autores concluyeron que ambos elementos buscaban eliminar el sistema de clases sociales para instaurar una igualdad entre todos. El bien común sería beneficio para encausar el amor hacia todos los ciudadanos sin importar su origen, raza o color de piel.
Ahora, todos son considerados socialistas cuando apoyan en buena forma las reformas sociales, como también aquellos que se oponen rotundamente al individualismo. Jean-Paul Thomas explica un poco que tales reformas sociales nacen durante el siglo XIX. Su origen se debe en parte a los estragos causados por la Revolución Industrial y la miseria que ésta trajo consigo para muchos países.
Según Thomas, para evaluar correctamente las raíces del socialismo había que analizar a fondo todas y cada una de las propuestas hacia la igualdad que mantuvieran una postura radical sobre el caso. Por otro lado, la publicidad ha estado presente desde siempre para cautivar de muchas maneras a un vendedor hasta hacerse de ese bien o servicio. (ver: Historia de la publicidad).
Uno de esos tratados radicales se presentó bajo el contexto de la Revolución Francesa durante 1793. La enragé Jacques Roux es bastante contundente al hacer unas afirmaciones respecto al acaparamiento de los recursos más vitales:
“Los productos de la tierra, como los elementos, pertenecen a todos los hombres. El comercio y derecho a la propiedad no pueden consistir en hacer morir de miseria y de inacción a nuestros semejantes”.
Émile Durkheim, el famoso sociólogo que escribió La división del trabajo social aporta su granito de arena para definir en mejor medida los conceptos de socialismo y comunismo, atribuyendo que la producción común se hacía de forma libre y sin ningún tipo de planificación; no obstante, el consumo de toda esta producción si se efectuaba mancomunadamente.
Inglaterra fue una de las primeras naciones en darse a conocer el socialismo en todo su esplendor, en su fase más utópica. Gran parte de su conocimiento es por la revolución industrial y las miserias que ésta trajo consigo, hasta el hecho de desarrollar un proletariado británico.
Para Francia, el socialismo tenía una acepción más cercana a la filosofía, gracias por uno de sus precursores estrella, Henri de Saint-Simon, considerado por ser uno de los grandes aportadores de su concepto en su estado más “embrionario”, para ser considerado por otros socialistas de la actualidad.
No hay que dejar atrás que el marxismo intercedió para elaborar el concepto de lo que hoy día es el socialismo científico. De cualquier modo, los economistas criados en épocas más recientes no son capaces de hablar sobre un valor de mercado y otro de cambio, con el fin de conocer la plusvalía.
Las opiniones encontradas no se hicieron esperar, cuando partidarios marxistas y anarquistas separaron sus ideas, principalmente porque la propuesta de Lenín resultó más agradable para los pensadores socialistas.
Si bien el siglo XIX fue muy importante por marcar el nacimiento del socialismo, el siguiente representó su máximo apogeo, principalmente en la Unión Soviética, los estados que manejan el comunismo dentro de Asia y el bloque comunista de Europa.
En el bloque socialista estaban aquellas regiones controladas por la Unión Soviética a raíz de la Segunda Guerra Mundial. En esta etapa existió mucha tensión por las diversas fricciones existentes con la cabeza capitalista, es decir, Estados Unidos. El enfrentamiento no se hizo esperar y en poco tiempo se dio a conocer la famosa Guerra Fría.
En esta guerra, claramente se quiso imponer la supremacía ideológica entre socialismo y capitalismo. Esto trajo como consecuencia que este movimiento dominara algunos países, sin llegar a ser un control directo de los mismos. Más adelante, se disolvió la URSS gracias a la presión de otros países y la debacle económica de los mismos.
El socialismo del siglo XXI se acentúa por el aporte de Heinz Dieterich Steffan, sin embargo, el fallecido presidente de Venezuela, Hugo Chávez, difundió aún más el término con su participación en el V Foro Social Mundial en 2005.
Chávez fundó el movimiento de Revolución Bolivariana, cuya transición final conduciría a la Democracia Revolucionaria. En una de sus cadenas nacionales en radio y televisión se expresó de la siguiente manera sobre su filosofía política:
“Hemos asumido el compromiso de dirigir la Revolución Bolivariana hacia el socialismo y contribuir a la senda del socialismo, un socialismo del siglo XXI que se basa en la solidaridad, en la fraternidad, en el amor, en la libertad y en la igualdad”.
El mandatario aseguró en 2006 que su sistema socialista procuraría cambiar el modo de ver el capital para hallar una plena transformación día tras día.
Origen
Ferdinando Faccinei es el gran responsable para que el término “socialismo” saliera a la luz en 1766 para defender ese contrato social que garantizaría una mejor vida para los ciudadanos. Appiano Buonafede también implementaría el vocablo, pero su sentido más moderno es aquel que se descubrió en 1830. En Francia y Gran Bretaña se recrearía los nuevos postulados de Robert Owen y de Henri de Saint-Simon.
Pierre Leroux en la Revue Encyclopédique en su post Del individualismo al socialismo hace un mayor hincapié para diferenciar ambos términos, pese a contar con muchas semejanzas. Sin embargo, el autor critica abiertamente que los dos casos están enfocados en demostrar un amor exagerado por la sociedad, como a la idea de liberar al hombre.
Para 1836 hasta 1838, Louis Reybaud en su texto Revue des deux mondes apoya abiertamente las posturas modernas del socialismo por causa de Saint-Simon y Robert Owen.
Lenín en su obra cumbre El Estado y la revolución presentada en 1917 explica que el socialismo es esa palabra que describe a una sociedad que no está sujeta a clases, sin embargo, el consumo de todos los productos si sería en común, por ende se asocia al comunismo.
El socialismo es apoyado por los simpatizantes del marxismo, al asegurar que la propiedad social debe operar todos los sistemas de producción hasta hacerlas colectivas. Con esto, la propiedad privada desaparece por completo, así como el capital generado, quedando atrás todo rastro de capitalismo. El marxismo es claro en cuestión de abolir las clases sociales para que todos sostengan el mismo liderazgo sobre la producción de un país.
Grandes movimientos políticos han apoyado el socialismo desde diferentes puntos de vista, pasando por la idea de apoyar el bien común junto a la eliminación de las clases sociales como el hecho de elaborar un proyecto que constituya la evolución positiva de un Estado. Otras entidades prefieren hacer uso del socialismo para introducir otro movimiento más, el de intervencionismo, que es el propósito de expropiar todas las empresas privadas para ser nacionalizadas.
La palabra socialismo sigue causando un efecto muy interesante en la actualidad, porque a toda costa trata de establecer un orden socio-económico en un Estado que funcione en pro de una ciudadanía trabajadora sin alardear de clases sociales. El socialismo está fundamentado en la creación de un público, sea a través de la evolución o de revolución social con la proclama de distintas reformas.
Una clave importante en la aparición del socialismo dentro de la sociedad es que las comunidades trabajadoras no tengan un tipo de subordinación o estratificación. Desde luego, esta idea no es absolutamente socialista, porque parte de los fundamentos propios del comunismo.
A lo largo de la historia que involucra el socialismo, se han creado grupos que apoyan este concepto y todos coinciden en que su nacimiento es propio del siglo XIX. Los trabajadores de esta época se esforzaron para ser escuchados, en su deseo de establecer una igualdad entre todos, cuya economía sea suficiente para satisfacer sus propias necesidades y mantener sus hogares con decoro.
El significado de este concepto se ha ido moldeando con el transcurrir del tiempo, alejado un poco de la postura marxista, al declararse que el socialismo es apenas una etapa inicial de lo que corresponde al comunismo. Es posible hablar sobre la democracia social, en la que se retribuye gran parte de las riquezas a las personas, gracias a un sistema fiscal.
¿Qué es?
Son muchos los países que adoptan un modelo socialista con un mismo fin: hallar la igualdad social que procure el bienestar común de todos; no obstante, unos países están más cerca de esta visión que otros, pero siempre persiguiendo el fin de ser una región netamente socialista. En términos marxistas, se basa en la construcción progresiva de un Estado.
La propiedad colectiva o pública siempre será de interés para el socialismo, ofreciendo mecanismos de defensa contra el sector capitalista que prefiere invertir en empresas privadas. La máxima premisa de este movimiento es involucrar una sociedad justa, noble, igualitaria y solidaria para enfrentar distintas problemáticas que ocurran en su entorno. Pensar en la clases sociales es un error, pero en repartir las riquezas equitativamente un gran acierto por parte de los pensadores socialistas.
Para aquellos que poseen firmes ideas socialistas, los medios de producción no necesitan de ser privados para consolidar su eficiencia. El socialismo al determinar que estos negocios privados poseen un capital menor, no es posible que ellos dominen el mercado. Además, propone que la economía de una nación sea planificada, para que los medios de producción estén a cargo completamente por parte del Estado.
Gracias a su intervención, el Estado es el interlocutor ideal para medir la fuerza de todos los sectores de mercado, como así garantizar que los productos futuros sean de la calidad esperada por los ciudadanos; esto no es aplicativo para el socialismo libertario y de mercados. Ahora bien, es indispensable conocer los principios básicos en que navega el socialismo:
- Los medios de producción y de distribución son de carácter público, con la finalidad de controlar todos sus objetivos, buscando el bien social de toda una comunidad.
- Todas las riquezas obtenidas jamás pueden caer en manos de empleados cuyas ideas fundamentadas sean capitalistas. Todas ellas estarán distribuidas en forma igualitaria para toda la sociedad. No se puede pensar en la posibilidad de categorizar la sociedad de acuerdo a su posición socio-económica.
- El Estado será capaz de intervenir cuando la situación económica y social por parte del sector productivo no marche de la mejor manera posible. Si esto ocurre, el mercado no tendrá disponibilidad a la hora de tomar decisiones.
- Por lo general, una nación que se aboca a los pensamientos socialistas tiene un gobierno de estructura fuerte y decidida a realzar sus valores esenciales. Tienen la potestad de tomar decisiones en momentos puntuales cuando consideran que algo no marcha bien.
Características
Como ya se ha explicado a lo largo de este post, el socialismo busca a toda costa en mantener una sociedad igualitaria, en la que perdure la solidaridad entre sus semejantes. La riqueza es para todos, así como se elimina de tajo las clases sociales para unificar a todos sus estratos en una misma unidad bien consolidada. El sector de producción es completamente público, pero igualmente se denominan como sectores del común. Si esas propiedades no son públicas, el Estado podrá tomarlas de manera democrática o siendo más radicales como la expropiación.
En la práctica, son más las características que salen a flote para favorecer este movimiento, a continuación se conocerán:
Planificación
En este caso, el socialismo se opone rotundamente al mercado libre, sino más bien confía en coordinarlo hasta hacerlo mucho más planificado. Todo el sector de producción estará estrechamente vinculado a las condiciones materiales y culturales que posee una sociedad, por ende, requieren estrategias más puntuales para ofrecer.
Redistribuciones
Las riquezas que se obtienen por fruto de los trabajos en producción no pueden quedarse en manos de un grupo minoritario o de los mismos gobernantes. Cada una de ellas junto a los ingresos materiales estarán destinados a la sociedad en general. La manera de poner este plan en marcha dependerá en gran medida de los gobiernos y su sistema personal de aplicar socialismo.
En cuanto a las prestaciones sociales y servicios de bienestar y de salud, estarán disponibles para los sectores de sociedad con vida austera o de muchas limitaciones, para mejorar su calidad de vida. El gobierno procura mantener esos servicios de manera gratuita para salvaguardar los pocos ingresos de sus trabajadores.
Igualdad económica y social
Si se quiere simplificar una característica bajo una palabra que aglomere todo lo que implica el socialismo es la igualdad. Si se mejora las relaciones económicas de un país, es mucho más sencillo de manejar las riquezas para que sean distribuidas por igual, con un trato hacia los subodrdinados que los hagan sentir parte de una familia.
Dicha igualdad confiere en brindar oportunidades económicas y sociales para que todos los ciudadanos puedan integrarse en las comunas. El socialismo intenta que la clase social sea una sola, más humana y sensible ante la problemática que sufre una nación.
Igualdad, cooperación, fraternidad, comunión social y camaradería son parte de los factores que más deben influir para decir con propiedad que un país o región está fomentada en leyes socialistas, con la ciudadanía siendo el perfecto ejemplo de ello. Un concepto muy importante que debe conocerse es el de división del trabajo, cuya sociedad juega un papel importante en la distribución de las tareas para aligerar la carga laboral.
Muchos críticos se han opuesto a esta idea que el socialismo pueda cubrir una igualdad completa, porque no tiene la capacidad de brindar méritos de los ingresos propios al de la empresa privada. Gracias a ello, siempre se hablará de una desigualdad en la sociedad, por muy buenos valores morales inculcados para armar un Estado socialista.
Opuesta al capitalismo
El capitalismo es un movimiento que si realza las clases sociales y el socialismo está en contra de ello. La competencia económica y el acaparamiento de los bienes no serán posibles si se quiere plantear seguir una filosofía completamente socialista.
El sistema capitalista procura que las personas velen por su bienestar propio, llamando a la individualidad. Por otro lado, el socialismo se sostiene en pensar en el bienestar social de un colectivo. Siempre es necesario tener en mente el bien común antes que el propio.
Abolición de las clases sociales
La sociedad que impera en este concepto es unificada y sin categorizarse bajo ningún estrato. Todos pertenecen a una misma clase, sean ricos, pobres o de ingresos que hagan de un grupo de personas pertenecer a la clase media. Como prácticamente todos los medios de producción de un país capitalista son públicos, es un hecho que la clase capitalista no estará contemplada en socialismo. Esto no significa que el gobierno y sus simpatizantes tengan sus propios privilegios y vivir como cualquier seguidor nato del capitalismo.
Los capitalistas privados están enmarcados en socialismo, pero el gobierno posee la capacidad de controlar sus actividades, en otras palabras, tienen cierta libertad pero al mismo tiempo con restricciones impuestas por el gobierno.
Diversidad
En este caso, se habla de una sociedad en la cual todos tienen derecho de ser tomados en cuenta, sean por sus capacidades intelectuales o de otra clase de talentos. Todos ellos tendrán la opción de demostrar sus destrezas para ser tomados en cuenta en la cooperación y estructura de las actividades administrativas y gubernamentales. El énfasis es que cada sociedad impongan una ideología unilateral.
Ideas religiosas
La religión en cualquier ámbito posible siempre es polémico y en socialismo no es la excepción. No obstante, muchos de los pensadores socialistas son cristianos y aseguran que si es posible mantener una interacción de ambos elementos. Para ir más allá, se conoce que las primeras comunidades cristianas mantuvieron preceptos de igualdad y fraternidad entre sus mismos ciudadanos.
De alguna manera el aspecto sexual entra en juego, como algunas formas de tener sexo entre los ciudadanos o suprime ideas de roles para los géneros.
Mejora la calidad de vida en personas de bajos recursos
La mejor obra para que las personas ubicadas en la clase más baja tuvieran las mismas oportunidades de empleo que el resto de la sociedad. En socialismo se evita en la medida de lo posible de explotar a estos ciudadanos laboralmente. Sería ideal que el Estado establezca medidas motivacionales para hacerles olvidar por completo la idea de su vida austera. En cuanto a los ingresos, deberán ser equitativos para cada uno de ellos sin excepción.
Esta característica del socialismo si bien se presenta como un hecho positivo, también podría acarrear pérdidas considerables para el Estado, porque la eficiencia, el trabajo duro y el incentivo de estas personas no sería el mismo si no observan resultados con prontitud en sus ingresos equitativos.
Monopolio del Estado
Así como existen empresas que generan muchos ingresos para determinado país, cada uno de ellos regidos por su ley de demanda, el socialismo se opone a ello. En las reformas socialistas queda estipulado la no competencia entre mercados, dando a entender que el Estado es el único mercado que debe operar en detalles de marketing y ventas.
Todo tipo de propiedad masiva que se maneje en la región es de carácter social o pública. En este caso, la propiedad y los negocios privados pasan a formar parte exclusivamente del capitalismo. De acuerdo a esto último, todas las empresas mineras, fábricas textiles, tiendas, empresas de telefonía, canales de televisión y el tratamiento de tierras estarían nacionalizadas para entrar dentro del marco socialista.
Al momento de tomar decisiones de índole económica, son las autoridades del Estado quienes asumen este papel de garantes de las riquezas y resto de ingresos materiales. Estos individuos deberán vigilar que las empresas ya nacionalizadas operen con fines de lucro; de la misma manera toman las riendas en aquellas compañías que en algún momento iniciaron su transitar como privadas.
Quienes no están de acuerdo con los fundamentos del socialismo establecen su postura al declarar como «incompetente» esta etapa de nacionalizar una empresa privada que ya estaba ofreciendo muchas ganancias. Indagan que debe prevalecer la motivación en los obreros para que los mismos sean eficientes a la hora de desempeñar cargos. Si llega a ocurrir lo contrario, el trabajo de su parte se haría más pesado.
Cubrir necesidades
Cuando un país se rige en el socialismo puro podrán estar tranquilos, porque probablemente se hallan amparados por la seguridad social. Las necesidades básicas por parte de la sociedad más pobre del Estado estarán cubiertas por el gobierno en gran medida.
Se podría tomar esta característica como una de las principales ventajas que se manejan en socialismo. Los adversarios de esta postura no están muy de acuerdo con ella, porque el ofrecer ayuda para cubrir las necesidades básica de la clase más baja, se estaría incurriendo con doble propósito: como herramienta de apoyo en campañas populistas.
Tampoco sería lo ideal que el Estado se acostumbrara a dotar con recursos de calidad a la clase obrera en un largo lapso de tiempo, porque de otra manera, ellos verían en el Estado su gran salvación y que sin él no podrían seguir adelante. Sin duda, esto hace que el gobierno sea más autoritario y se aferre al poder.
Costos fijos en los productos
Los precios fijos no nacen por obra de la propia empresa, sino son las autoridades del Estado los encargados de evaluar los precios más asequibles para que el público tenga disponibilidad plena. De llegar a ocurrir esto, estos precios se mantendrán a posteridad. En este segmento entran en juego los precios del mercado en el que son vendidos todos y cada uno de los bienes a consumir, como los precios para arreglos de cuentas.
Para dictaminar cuál sería el precio ideal para fijar, las autoridades tomarán en consideración el valor que posee los bienes y servicios. Los oponentes al socialismo están de acuerdo que esta medida se encuentra equivocada en su totalidad, porque gracias a los precios fijos, conducirían a la escasez de alimentos y productos de primera necesidad. La corrupción no escapa para aquellos gobernantes que acaparan los alimentos para venderlos a otro precio separado del oficial, entre otros acontecimientos negativos en el que salen más afectados los ciudadanos de menores recursos económicos.
Intervencionismo
Constantemente, el Estado estará vigilando que las riquezas sean entregadas en forma distribuida a toda una población. Esta es la mejor alternativa para asegurar que el proceso de equidad se está cumpliendo como los garantes del socialismo lo anhelan. Cuando el socialismo es arbitrario y sin leyes a respetar, la desigualdad entra por la puerta.
Diferentes modelos económicos
Cada entidad maneja su economía a su conveniencia, aunque muchos de ellos se apegan a las cooperativas como buenos ejemplos de operar de manera socialista. Por otro lado, más de un país se ha mostrado flexible frente a la propiedad privada, aunque esto depende del grado radical en que muchos se dejan influenciar por el socialismo.
La comunidad toma decisiones
El socialismo ejerce una política completamente social, en el que cada individuo de una comunidad tendrá el derecho de expresar su acuerdo o inconformidad al momento de tomar decisiones. El objetivo es que las personas tengan una participación directa en el trabajo en general, porque de alguna manera serán los primeros afectados o responsables por si algo no sale como lo esperan.
No genera casi incentivos
A diferencia del capitalismo, los obreros socialistas no tendrán que esforzarse demasiado para ver los frutos de su trabajo. Esto logra traer consecuencias para aquellos que están cansados de no recibir la motivación suficiente por su desempeño, migrando de una compañía pública a una empresa privada en la cual le sea devuelta o depositada esa confianza por dar lo mejor de si en el empleo.
Como el Estado es el máximo proveedor de las necesidades básicas, los trabajadores no tienen por qué esforzarse más si ya tienen parte de la riqueza consigo gracias a las autoridades. Es imposible negar el hecho que la producción y el aumento de la economía de un territorio sería de lo mediocre hasta lo realmente deficiente en tema de ingresos.
La utopía es un riesgo
Pese a que se habla de una igualdad en el trato en la sociedad y en la distribución de las riquezas, es un hecho innegable que los simpatizantes más fieles junto a las jerarquías establecidas con anterioridad, son quienes gozarán más por la entrega de los bienes y servicios. Quienes planifican este sistema no están exentos de ser corrompidos por otras fuerzas capitalistas, pero de suceder, las deficiencias en el mercado controlado por el Estado serían más deficientes de lo normal.
El sistema no puede regularse a su antojo, sin mencionar que el mercado libre es imposible de operar en este sentido extremo socialista. Esto no deja en duda que la corrupción siempre estará frente a la puerta para tocarla y así entrar.
Tipos
Hasta la fecha, se conocen múltiples tipos de socialismo, pero en este renglón se mencionarán los que más han marcado la pauta desde que se fundó este movimiento en el que todos los ciudadanos merecen las riquezas equitativamente bajo un trato igualitario.
Científico
El socialismo científico se debe en gran parte al estudioso Friedrich Engels, como una manera de separar un poco lo que representa este tipo respecto a las ideas marxistas. Está asociado a lo que se conoce como el materialismo histórico y el método científico. De la misma manera, el hombre pasó de formar parte del proletariado común a tomarse en cuenta para la revolución socialista.
Karl Marx y Engels siempre trabajaron juntos para que su socialismo científico se desligara de los otros movimientos socialistas que surgieron en pleno siglo XIX.
Utópico
Su denominación también corre por cuenta de Marx y Engels. Para conseguir los bienes producidos para el pueblo, todos debían trabajar obligatoriamente para alcanzarlos, igualmente, la sociedad estaba capacitada para ejercer un trato digno entre todos sus integrantes. Busca a toda costa eliminar la propiedad privada para que las personas con menos posibilidades económicas tengan un alcance mayor de las riquezas del Estado.
Con la aparición de la clase obrera entre 1830 y 1840, el socialismo utópico ganó un impulso mayor para superarse como movimiento. La equidad y la igualdad siempre resaltó como los salvoconductos de todas las personas que hicieran vida en una nación.
Según datos recaudados, realmente fue Auguste Blanqui quien determinó al socialismo utópico por primera vez en 1839, explicando que el mismo se opone a todo lo que conlleva el socialismo científico, creado por Engels y Marx. Blanqui aseguró que la propuesta de este par de intelectuales apenas y llegaban a ser «formulaciones idealizadas».
Se ha pensado que los partidarios del socialismo en algún momento de sus vidas mantuvieron rasgos utópicos de lo que representa el socialismo, porque apoyaron la revolución industrial hasta elaborar un análisis del mismo. Fourier y Owen reprochan las declaraciones de Blanqui, al constatar que sus ideas si son consideradas como realistas, pues la construcción de sociedades comunistas si fue un hecho verosímil.
Los utopistas se aseguraron que sus ideas no se quedaran simplemente en especulación socialista, porque muchos de ellos trasladaron sus ideales hasta elaborar buenos proyectos políticos.
Cristiano
El socialismo cristiano también puede designarse como socialcristianismo. En esta ocasión, la corriente se ve influenciada por todos aquellos pensadores socialistas que al mismo tiempo apoyan los dogmas cristianos. No hay que tomar una sola interpretación como la oficial, pues son muchas cosas de la que este movimiento tiene por hablar; ello depende en parte de los cristianos que profesan su religión de distintos modos.
En Reino Unido, el socialismo cristiano entró con mucha fuerza en 1960, contando con el apoyo absoluto de algunos misioneros, como el caso de James Gareth Endicott. Para ir más atrás en el tiempo, la frase «socialismo cristiano» tuvo importancia en Gran Bretaña durante una etapa del siglo XIX, pero específicamente en 1850 cuando se publicó el famoso Tratados sobre el socialismo cristiano (Tracts on Christian Socialism) que más adelante se publicó en la prensa titulada «El socialista cristiano».
Otros impulsores que estuvieron de acuerdo con este tipo de socialismo fueron los clérigos pertenecientes a la Iglesia Anglicana, quienes se mostraron angustiados por los estragos que podría traer la revolución industrial. Por otro lado, también otro grupo de clérigos se sintieron altamente identificados por las ideas de Leminnais, quien además es considerado como el verdadero fundador del socialismo cristiano y del catolicismo social, como se conoce hasta la fecha.
1850 sin duda fue un año que tuvo mucha tela por cortar, principalmente por el nacimiento de la Asociación para el fomento de las asociaciones de trabajadores, aunque no transcurrió mucho el tiempo para que algunos ministros laicos se sintieran incómodos al promulgar ideas con las cuales no estaban completamente de acuerdo. No todo fue negativo, porque la sociedad de la clase media se mostró complacida en formar parte de la Asociación, ocupando el lugar de quienes no estaban de acuerdo con su creación.
Libertario
Quienes están de acuerdo con el socialismo libertario, tendrán una filosofía anti-autoritaria, es decir, es impensable que existan sociedades jerárquicas o clases sociales que pretendan dominar a los de menos recursos económicos e intelectuales. Más allá de ello, se promulga una socialización en que el Estado no tome todas las decisiones de lo que acontece en el sector empresarial público. No favorece la esclavitud salarial, los pagos injustos o las horas extra de trabajo, pero si promueve la asociación libre.
Un grupo de socialistas utilizan este término para desligarse por completo de aquellos quienes apoyan el monopolio del Estado en función del sector productivo, aunque ellos lo llaman como «anarquía social», con la cual no están de acuerdo. Ellos declaran que se pueden mantener los principios de igualdad, libertad y fraternidad, pero con la abolición completa de todas las instituciones que ejercen poder arbitrario. El Estado no puede tener el control sobre todos los negocios, porque de algún modo se las arreglan para crear su propia clase social hegemónica.
Esta corriente apoya de alguna manera a quienes no están de acuerdo con el autoritarismo y pretenden hacer sus críticas constructivas, al asegurar que un gobierno que abusa de su poder, en el fondo actúa como un Estado no legítimo de acuerdo a lo que realmente implica el socialismo puro. Sus seguidores de la misma manera puntualizan lo siguiente:
«El ejercicio del poder en cualquier forma institucionalizada —ya sea económica, política, religiosa, o sexual— brutaliza tanto al poseedor del poder como a aquel sobre el que se lo ejerce»
Con esta última cita se explica que si el control del poder del Estado es más desmedido, tiende a desmontar todo el concepto de lo que es socialismo, hasta caer fácilmente en una anarquía radical e inflexible. Para hacer un breve paréntesis, no hay que dejar de mencionar las bondades que tiene la demanda, pero calcularla permitirá tener un conocimiento más profundizado con este tema, considerando la elasticidad de la demanda.
Para tener un apoyo real, los socialistas libertarios utilizan las asambleas de ciudadanos, el municipalismo libertario, sindicatos, consejos comunales y demás medios que son de orden decentralizados, en el cual el gobierno no puede interceder como acostumbra a hacerlo.
Comunismo
Es otra corriente importante de orden socio-económico que respalda el pensamiento de mantener un bien común. Similar al socialismo, no existe la propiedad privada, ni las clases sociales y mucho menos el acaparamiento de los recursos por parte de las empresas autónomas.
El comunismo en sí mismo nació como un proyecto en el siglo XVI gracias a las distintas utopías que se afianzaron en el colectivismo agrario. Una de dichas utopías que causaron un mayor revuelo fue la de Tomás Moro, junto a toda la filosofía de batuvina presente en gran parte en la Revolución Francesa.
Fue hasta el siglo XIX que el comunismo recobró las fuerzas que le impulsaron a tratar diversos proyectos políticos y económicos bajo la asistencia de los simpatizantes del socialismo utópico y del cristiano. Más allá de ello, muchos de ellos se afianzaron en la cátedra que aprendieron en la escuela del socialismo científico.
Marx y Engels formaron el famoso movimiento de «Liga de los Comunistas» para tomar en cuenta su filosofía y crear partidos políticos con los jefes gubernamentales que se proclamaron comunistas de corazón. Con el paso del tiempo, esta liga se transformó en una organización internacional, pero con dirección hacia los pensamientos marxistas.
Presuntamente, la historia del comunismo nació en paralelo con la aparición de lo que se conoce como propiedad. De acuerdo al elemento de la propiedad, se delimita el concepto de comunismo actual respecto al primitivo, porque permite categorizar las clases sociales acorde al sector de producción. En comunismo es bastante frecuente la explotación, tanto en hombres como mujeres, pero con el paso del tiempo se ha ido refinando este proceso para que la corriente sea menos arbitraria.
Parece bastante habitual observar una lucha de clases entre los mismos trabajadores en el sector de producción, porque ninguno desea ser explotado con el surgimiento de las clases dominantes. De la misma manera, parece un hecho común que las sociedades capitalistas originen una crisis cíclica en esta misma lucha de clases que solo sería resuelta a través de los empleados asalariados.
Para que el comunismo esté estrictamente consolidado, es necesario que se creen partidos comunistas para que logren ejercer una especie de «dictadura sobre el proletariado», el cual sólo sea transitorio. El periodo de esta dictadura llegará a su fin cuando no se refieran más a las clases sociales, haciendo que el Estado tenga un mayor dominio de la producción. Por otro lado, siguiendo la tendencia de los conceptos económicos, es indispensable conocer la deflación, consistiendo en la baja de los precios, contraria a la inflación.
El comunismo a lo largo de los años ha mantenido una serie de desacuerdos con ideas promovidas del marxismo, aunque en otros casos se ha observado que muchos pensadores marxistas están claramente atraídos por el proceso de otorgar el bien común para todos sus ciudadanos.
Mucho se ha hablado sobre el comunismo, pero es una excelente idea simplificar su concepto en distintas características a continuación:
- Se opone totalmente al capitalismo europeo, pero hace mayor énfasis en la que desempeña Estados Unidos a partir de la revolución industrial que, afecto considerablemente lo que se conoce como orden social y sus medios de producción.
- Aparece la clase obrera o denominada también como el proletariado, que son dominados por la burguesía.
- Se habla de una estructura y una superestructura, de acuerdo con las apreciaciones de Marx y Engels, los fundadores del comunismo. En el primer caso, forman parte todos los ciudadanos con sus respectivos sistemas de producción; para el segundo, están adscritas todas las instituciones que se hacen cargo de las tareas sociales, pero que operan de manera desigual, por lo que se consideran Estados capitalistas.
- Es totalmente permitido la lucha de las clases sociales, que están persiguiendo su propia necesidad de ser iguales unos a los otros. Por ejemplo, si la burguesía tiene en sus manos la producción, los trabajadores representan la fuerza del trabajo y sin este elemento, no hay compañía que logre subsistir sin la mano de obra.
- Esta corriente plantea que en caso de darse el capitalismo, el proletariado no tendrá el control pleno de la producción de una región, ni de sus ganancias y tampoco de los resultados finales en bienes y servicios. Esto traería como consecuencia la explotación o la alienación laboral.
- El comunismo concibe que la alienación es por motivo de la presencia de una cultura dominante, haciendo que la clase trabajadora no tome conciencia del rol que deben cumplir en un Estado comunista. Gracias a este hecho, los capitalistas pueden aplicar su poder arbitrariamente, siendo prácticamente imposible suprimir esta corriente de pensamiento en la entidad. La revolución sería ese sendero perfecto para despertar la conciencia social que parece extinta.
- Para acabar con la explotación, alienación y desigualdad en las clases, el comunismo propone eliminar todas las empresas privadas que existan en su nación. De lograrse este propósito, los trabajadores si tendrían voz y voto para participar en los medios de producción. Los sindicatos son el arma perfecta para que el Estado esté conforme con las actividades desarrolladas en estos sectores.
- La clase proletaria es vista como «el pueblo» y dentro de ese estrato no caben los pensamientos individualistas del hombre. Tampoco es bien visto la auto-promoción social, el libre mercado y la libertad económica de una región en particular.
- Si la burguesía es demasiado estricta y dominante, en cualesquiera sea su clase (alta, mediana y baja) el comunismo se encargará de eliminar estas autoridades. Mayormente estas burguesías están compuestas por instituciones académicas, religiosas y culturales.
- La sociedad será autónoma, pero no individualista, para que el Estado se ocupe de otras actividades sin que éste intervenga cuando algo no funciona correctamente. Para corregir los errores, los mismos trabajadores indagarán para dar solución.
Vs capitalismo
- En primer lugar está el socialismo, tratándose de un sistema de organización social que defiende la propiedad pública frente a la privada. La corriente busca expropiar o tomar democráticamente estas propiedades autónomas para hacerlas suyas. Los trabajadores tendrán a su disposición las riquezas de su trabajo en forma igualitaria. Por el contrario, el capitalismo se apoya en el mercado libre y en la empresa privada. Es un movimiento que prevalece gracias a la individualidad; el socialismo procura tomar a todos sus ciudadanos en cuenta sin importar su clase social, sexo y condiciones económicas e intelectuales.
- Un sistema capitalista está basado en la completa libertad económica, apoyado en el crecimiento económico y en el libre albedrío por parte de los consumidores al momento de elegir su producto. En otro extremo, el socialismo se encarga de controlar toda la economía bajo el protagonismo del Estado. No existe la posibilidad de las clases sociales y se implementan programas de ayuda para salvaguardar la integridad de las personas con menos recursos.
- Todos los medios de producción ubicados en el capitalismo son de propiedad privada; todas las ganancias obtenidas por estos medios están destinadas para inyectar un mayor capital a las propias empresas, siendo los accionistas o propietarios los más beneficiados. En socialismo, todos los bienes son distribuidos lo más equitativo posible a toda la sociedad. La idea es separar las clases sociales, sin pensar que el rico tiene más que el pobre, pero si creer que el pobre tiene las mismas oportunidades económicas que el rico.
- El capitalismo no está de acuerdo con que el gobierno intervenga la propiedad privada; de llegar a suceder este evento, los economistas que apoyan este sistema aseguran que provocará deficiencias al momento en que el Estado tome posesión de lo suyo. Para el socialismo si es posible la intervención democrática o arbitraria de los bienes para hacerlos colectivos. En esta instancia, todos los ciudadanos tienen el derecho al acceso de los productos básicos y de consumo.
- Karl Marx, Friedrich Engels y Lenin fueron los máximos precursores del movimiento socialista, mientras que Richard Cartillon y Adan Smith se preocuparon por sostener sus ideales capitalistas.
- La corriente capitalista puede sobrevivir sin problemas a la anarquía, democracia directa o en su defecto, a la república democrática, siendo esto último el máximo ideal de sus pensadores. Por el contrario, los socialistas están a favor de la democracia participativa.
- En el caso capitalista, los medios de producción de entidades determinadas están regidas por empresas y mercados privados, con fines de lucro, de cuyas ganancias se beneficiarán las propias empresas, como también para mejorar la economía de esa entidad. Para el sistema socialista existe una mayor planificación para que sus empresas públicas operen de la forma más eficiente posible. Todas estas empresas funcionan sin fines de lucro.
- Las clases sociales si existen en el sector capitalista, aunque éstas se definen en parte del capital con el que cuentan. La sociedad que tiene un nivel de vida superior son aquellos que tienen las riquezas obtenidas por los medios de producción, designados como capitalistas, pero la clase trabajadora depende de sus sueldo. En cambio, es posible hablar de clases en socialismo, pero de acuerdo a sus respectivos cargos políticos; sin embargo, en la sociedad del común no pueden establecerse jerarquías.
- En ambas corrientes predomina la libertad de culto y religión.
- Es posible encontrar propiedades públicas laborando en países netamente capitalistas, como el caso resonado de Estados Unidos, pero ellos juegan un papel secundario o complementario para la economía del país. En cuanto al socialismo se habla de una propiedad personal (hogar, ropa, comida, zapatos, entre otros) y una propiedad pública perfectamente establecida. Estos medios están controlados por el Estado, aunque los trabajadores igualmente son capaces de supervisar el resto de las actividades.
- La individualidad es un rasgo propio del capitalismo, cuyos ciudadanos son capaces de tomar decisiones por sí mismos, con libre albedrío y capacidad de razonar sin el Estado respirando sobre sus espaldas. Todo capitalista será capaz de reconocer sus errores y de asumir las consecuencias de sus acciones. Este tipo de libertades hacen que el consumidor eleve la capacidad económica de la región. Para el socialismo, el sistema educativo es absolutamente obligatorio, pero la decisión de matrimonio y elección de religión es individual en cada persona.
- El mercado es libre para saber cuánto invertir, producir y distribuir productos en sistema capitalista. Cada uno de ellos pueden ser libres, regulados o con un leve proceso de planificación. Bajo los efectos del socialismo ocurre todo lo contrario, al coexistir una mayor planificación en todas las etapas de producción. Los mercados tienden a ser más centralizados o descentralizados.
- El capitalismo es el verdadero parteaguas para que sea posible la economía moderna, no por casualidad Estados Unidos es el sostén de esta corriente en el que predomina con amplitud el libre mercado y negocios privados. Incluso, logran manejar planificaciones levemente socialistas. En cambio, los países socialistas como Venezuela, Cuba, Corea del Norte y China proveen en su Constitución la protección de la clase obrera.
- Los productores se sienten más cómodos cuando trabajan sin el radar del Estado sobre sus hombros, además que logran integrarse satisfactoriamente en programas económicos de la entidad en cuestión. Las empresas privadas pueden ser manejadas por accionistas, gerentes, cooperativas de trabajadores o individuos naturales. En respuesta a esto, el socialismo se ocupa de la propiedad pública social, cuyas ganancias beneficien a la clase obrera y el pueblo en general.
- El capitalismo se apega a los siguientes movimientos políticos: liberalismo clásico, social, libertarianismo, neoliberalismo, socialdemocracia moderna y anarquismo. El socialismo se influencia, por su parte del socialismo democrático, comunismo, socialismo libertario, sindicalismo y anarquismo social.
- En algunos momentos de la historia, tanto capitalismo como el socialismo han sido reconocidos bajo otras acepciones como capitalismo de mercado libre, capitalismo del laissez faire, neomercantilismo o nuevo capitalismo. Hacia el otro extremo los sinónimos para el socialismo son comunismo, socialismo de estado, anarquismo social o socialismo de Estado.
- Desde tiempos remotos ha existido el comercio en todo su esplendor, como la idea de compra-venta, pero el capitalismo se debe en gran parte de los preceptos establecidos por Smith en el siglo XVIII. Por su parte, Tomas Moro hace hincapié en 1515 que la propiedad debe ser común para todos, con los bienes garantizados a la ciudadanía.
- Generalmente, los capitalistas se sienten orgulloso de lograr promover una corriente libre en mercado y disposición de la producción, factor que no es muy bien visto por los expertos en temas de socialismo. En otro extremo, el socialismo se asegura de mantener una clase trabajadora que piense en colectivo, sin restar méritos al resto originando la desigualdad y la individualidad.
- El verdadero enfoque del capitalismo es que sus seguidores tienen filosofías individuales de trabajo, sin la constante supervisión del gobierno. Por otro lado, el socialismo prefiere el trabajo conjunto del Estado y toda una sociedad para sacar adelante sus empresas públicas.
Ventajas
- Se acaban las propiedades privadas y cada uno de sus medios de producción. Empresas, fábricas e incluso las tierras son tomadas por el Estado. Esta ventaja no aplica en casas o compañías automotrices, porque ellas siguen siendo privadas, tomando en consideración el poder de cada una de ellas o si en ese Estado el socialismo que aplican es el libertario.
- Se eliminan las clases sociales y los roces que existan entre unos y otros, con los cuales marcaban sus diferencias.
- Temas como la salud son de responsabilidad social al que hay que mostrar preocupación.
- También representa un interés social el tema educativo, el cual es gratuito y obligatorio para todos.
- Los bienes y servicios están destinados a cumplir con cada una de las exigencias por parte de los consumidores.
- El socialismo procura que la tasa de desempleo sea bastante baja, teniendo en cuenta a todas las personas para trabajar.
- La economía es mucho más planificada, para no despilfarrar el capital del Estado innecesariamente en negocios que no brindarán los resultados deseados.
- La relación política, social y económica se resuelve a través de las instituciones del Estado.
- Las personas tienen derecho al pleno disfrute del deporte, la ciencia y el arte. Aunque estos elementos son un tanto secundarios que coexisten con las necesidades más básicas, forman parte de la planificación social que aseguran el entretenimiento de los simpatizantes socialistas.
Desventajas
- Si a una empresa privada no se le da la oportunidad de seguir adelante en un Estado socialista, posiblemente tenga que emigrar antes de ser nacionalizada; en caso que la expropiación no sea democrática, sino arbitraria.
- Al final de cuentas, las clases sociales surgen dentro del propio Estado, porque parte del gobierno siempre recibe más privilegios que los mismos ciudadanos. No se habla de una completa abolición de los estratos. Otro tópico económico de gran importancia es el marketing social, del cual hay mucho por descubrir.
- A veces no es posible dar abasto a toda una problemática social de una región, al no cubrirse en su totalidad con todos los recursos. La empresa privada con mejor capital si es capaz de ocuparse en gran medida de este asunto.
- Se necesita de mucha motivación para hacer que una persona no interesada en el estudio reciba educación. Hay que saber inculcar los valores de metas realizadas y proyectos de vida.
- Se cumple por un largo tramo la premisa de cubrir las necesidades de las personas, a cambio de sacrificar los lujos y comodidades que tenían los de clase alta. Los del gobierno si tienen estos privilegios que un individuo común con su trabajo no puede alcanzar, provocando la desigualdad de condiciones.
- Puede existir una tasa menor de desempleo, pero muchas veces el salario no es el merecido para quienes pasan mayor parte del día cubriendo un horario laboral. El mejor ejemplo de esta desventaja es Cuba.
- No hay posibilidad de la libre competencia empresarial.
- Si el Estado ejerce una fuerte dictadura en su región, las limitaciones de los ciudadanos por el entretenimiento será mucho mayor; de llegar a ocurrir este acontecimiento, el socialismo de esa región estará siendo quebrantada de la peor manera, provocando una verdadera persecución a toda una ciudadanía.
- El gobierno como tiene una mayor noción de lo que implica el factor social quizá no desarrolle por completo el ámbito científico o tecnológico, pues prefieren el trabajo colectivo o los oficios más básicos, imposibilitando que las personas tengan acceso completo a los servicios innovadores. A estos hombres le son inculcados que vivirán en una nación que estará libre de guerras, conflictos y sin distinción de clases sociales que rompan la unidad que han establecido.
Ejemplos
En este apartado se conocerán algunos de los países que han adoptado el modelo socialista como principal filosofía para gobernar.
-China: Desde 1949 se ha creado un partido socialista único en este territorio. De cualquier modo, no restringe por completo la economía de mercado libre.
-Vietnam: Creó su partido único a partir de 1975.
-Chile: El socialismo que presentó este país en gran parte se debió a la gestión de Salvador Allende, al momento de fundar su partido entre 1970 y 1973.
-Nicaragua: A partir de 1999 este país opera el socialismo, pero tampoco descarta el capitalismo; es decir, las dos corrientes operan de manera mixta.
-La Unión Soviética: Si se trata de observar un socialismo real y auténtico, fue el que mantuvo la Unión Soviética, hasta el hecho de consolidar un partido que se mantuvo activo por muchos años, entre 1922 y 1991.
-Cuba: Considerado como un país socialista a partir de la gestión de Fidel Castro en 1959.
-Corea del Norte: Sostienen una fuerte dictadura socialista a partir de 1945.
-Bolivia: Mantiene una tendencia socialista que procura el bienestar de su sector indígena a partir de 1999. Se considera un país socialista sin el pleno descarte del capitalismo y la función de empresas privadas.
-Dinamarca, Noruega, Suecia, Islandia, Finlandia: Cada uno de ellos manejan modelos económicos de mercado bastante parecido, pero el Estado se encarga de supervisar cada uno de estos mercados para que no sean ejemplos capitalistas.
-Venezuela: Pasa a formar parte como país socialista a partir de 1999, con la elección de Hugo Chávez como Presidente de la República.
Resumen
Ferdinando Faccinei es el gran responsable para que el término “socialismo” saliera a la luz en 1766 para defender ese contrato social que garantizaría una mejor vida para los ciudadanos. Appiano Buonafede también implementaría el vocablo, pero su sentido más moderno es aquel que se descubrió en 1830. En Francia y Gran Bretaña se recrearía los nuevos postulados de Robert Owen y de Henri de Saint-Simon.
A lo largo de la historia que involucra el socialismo, se han creado grupos que apoyan este concepto y todos coinciden en que su nacimiento es propio del siglo XIX. Los trabajadores de esta época se esforzaron para ser escuchados, en su deseo de establecer una igualdad entre todos, cuya economía sea suficiente para satisfacer sus propias necesidades y mantener sus hogares con decoro.
La propiedad colectiva o pública siempre será de interés para el socialismo, ofreciendo mecanismos de defensa contra el sector capitalista que prefiere invertir en empresas privadas. La máxima premisa de este movimiento es involucrar una sociedad justa, noble, igualitaria y solidaria para enfrentar distintas problemáticas que ocurran en su entorno. Pensar en la clases sociales es un error, pero en repartir las riquezas equitativamente un gran acierto por parte de los pensadores socialistas.
Grandes movimientos políticos han apoyado el socialismo desde diferentes puntos de vista, pasando por la idea de apoyar el bien común junto a la eliminación de las clases sociales como el hecho de elaborar un proyecto que constituya la evolución positiva de un Estado. Otras entidades prefieren hacer uso del socialismo para introducir otro movimiento más, el de intervencionismo, que es el propósito de expropiar todas las empresas privadas para ser nacionalizadas.
Si bien el siglo XIX fue muy importante por marcar el nacimiento del socialismo, el siguiente representó su máximo apogeo, principalmente en la Unión Soviética, los estados que manejan el comunismo dentro de Asia y el bloque comunista de Europa. Así como el siglo XIX fue bastante importante para efectos del socialismo, es innegable que la crisis financiera es otro momento que siempre ha afectado a muchos sectores de producción
En el bloque socialista estaban aquellas regiones controladas por la Unión Soviética a raíz de la Segunda Guerra Mundial. En esta etapa existió mucha tensión por las diversas fricciones existentes con la cabeza capitalista, es decir, Estados Unidos. El enfrentamiento no se hizo esperar y en poco tiempo se dio a conocer la famosa Guerra Fría.