El cane corso o mastín Italiano a pesar de ser un can de gran talla, con mucha personalidad y energía, es ideal como compañero familiar, ya que lo que tiene en tamaño también lo tiene en afecto para sus dueños, en especial a los niños. Portador de una inteligencia natural extraordinaria, excelente como guardaespaldas personal, pues es muy equilibrado y protector. Aquí podrás conocer todo sobre él.
Cane Corso o Mastín Italiano, ¿Qué necesito saber?
Ideal como un can de guarda y defensa, de muy buen carácter lo que lo ha hecho acreedor de ocupar un sitial como mascota de compañía, gracias a su docilidad y afecto que muestra a sus dueños, es muy familiar y gusta de la compañía de los niños. Todo lo cual se desplegará en este fabuloso post, donde se podrá conocer al detalle como es este magnifico animal, como su carácter, salud origen, historia, entre otros interesantes datos.
De él se sabe que es un cano muy protector, paciente y tolerante, sobre todo con las más pequeños de la casa que suelen fastidiar a las mascotas perrunas. No obstante, es necesario para lograr una mejor y óptima sociabilidad, educar al cane corso cachorro o en los primeros meses de vida preferentemente.
Para empezar
Algunos datos más personales o descriptivos para conocer mejor al cane corso, son los siguientes:
- Altura a la cruz: de 64 y 68 cm los machos; entre 60 y 64 cm las hembras.
- Peso: entre los 45 y 50 kg en los machos; y 40 a 45 kg las hembras.
- Capa: negra, gris plomo, gris pizarra, leonada clara, leonada oscura, atigrada o roja cervato.
- Aptitudes: perro de guarda y de defensa.
- Clasificación general: razas de perros grandes.
- Clasificación según la AKC: Misceláneo.
- Clasificación según la FCI: Grupo 2: Perros tipo Pinscher y Schnauzer Molosoides y perros tipo montaña y boyeros suizos.
Sobre el título de cane corso, se han tejido algunas premisas, una de ellas apunta a que corso proviene del término griego kórtos, que se define como corral, áreas cerradas o cercados; mientras que la otra, sostiene que corso nace del latín cohors, que traduce como guardián. No obstante su veracidad, cualquiera de las dos vertientes, refieren y definen al cane corso, pues se usó por muchos años para guardar y proteger animales de corral y pastoreo.
Historia y origen
Según los expertos que han estudiado la procedencia del cane corso, se establece que el mismo debe su origen linealmente del Canis pugnax, que era un canino moloso que había en la Antigua Roma.
Este bello can de organismo fuerte, de gran resistencia y disuasivo, solían usarse en escenarios de guerra para pelear. Los datos de su desempeño y de su raza datan del siglo XVI, período durante el cual los italianos destinaban al cane corso en la caza de jabalíes y como guardas de granjas y corrales.
De tal forma, que por su porte temible y feroz sumado a fuerte cuerpo, da cuenta de su nombre, ya que el término de corso, además del ya señalado anteriormente, se traduce como potente, fuerte, moloso, robusto e imponente, siendo estos apelativos sin lugar a dudas, parte de su cualidades.
En tiempos un poco más recientes, ha localizaron antiguos registros históricos, que dan fe de que el cane corso, donde la raíz de su nombre se sustentaba en diversos poemas apuntados en versos y en prosa.
Mientras que en 1998, se publicaron ciertas conclusiones de un estudio efectuado a la raza, donde resaltaban el destino castrense del cane corso. Todo lo cual prueba que este canino Italiano ha permanecido por tanto, con sus rasgos propios e inéditas pese a los años transcurridos.
Este magnífico can desde sus inicios se ha mantenido en contacto permanente con el ser humano, además de protagonizar junta a este algunas funciones por orden del mismo hombre.
Lo cual significa, que si un individuo asumía la responsabilidad de contar con un cane corso, de igual forma, tenía que corresponder a alguna faena o bien adicional. No obstante, la vida pasada del cane corso, es muy similar a la de hoy día, dando la impresión de que el tiempo se haya congelado.
En lo militar
Ahora sobre su tarea puramente castrense, se tiene que el nombre dado por la milicia se basó en el cane cohortis, es decir, el canino que acompañaba a la cohorte, conocida como una unidad militar enfilada por 485 individuos de la 10ma. parte de una legión romana.
Un perrete con fuerza, valeroso y obediente, teniendo como función primaria en los viajes en compañía de las centurias y protegiendo al campamento, ya que era el guarda y protector, así como de cacería mayor, muy valorado por ello, ya que proveía de carne a los soldados.
Los ancestros directos del fabuloso cane corso, datan del antiguo molosoide, fiel acompañante de las legiones del Imperio romano. Previo a esto la raza estaba repartida por toda Italia, aunque hoy día, sólo tiene presencia en Apulia, y localidades periféricas de la Italia meridional.
Durante la era dorada del ejército romano, se sumaban voluntarios y de soldados que servían al Imperio por unos 20 años. En el momento que estos veteranos se retiran, como muestra de gratitud por sus servicios les donaban vastos terrenos fértiles donde vivir, cuyas plantaciones de cultivos la heredan sus hijos, y donde muchos de dichos militares en retiro dejaban la milicia llevando consigo sus armas, uniformes y cane corso, que sirvieron y los acompañaron con lealtad.
De esta forma, los diversos tipos de dogos y mastines de las legiones se establecieron por toda Italia, incluso por regiones más lejanas del Imperio, donde se establecen los soldados en retiro. Gracias a esa dispersión, de a poco se fue formando, el germen de las diferentes razas de molosos en toda Europa.
Fue así que cane corso alcanzó la popularidad que ostenta en toda Italia, y que además ha quedado plasmado en varios testimonios artísticos, desde esculturas, grabados hasta pinturas y relatos de distintas épocas, que dan prueba de la antigüedad de este valioso animal.
Asimismo, el cane corso proliferan sobre todo en Apulia, donde era muy apreciado como guardián de granja y de caza, donde gracias a ello la raza se recuperó, cuando los cinófilos italianos volvieron a poner sus ojos en ella, logrando que en 1988 se reconociera oficialmente, y sirvió de preámbulo para su expansión internacional.
Hoy día, esta raza tiene presencia en casi todo el mundo, y es especialmente popular, además de en Italia, en España, Rusia, México, Argentina, y otros países del este de Europa. Amén de obtener el reconocimiento previo por parte del American Kennel Club.
Descripción física/características
Para describir al cane corso características corporales, es preciso resaltar que es de gran talla y de complexión fuerte y compacta; con un físico de proporciones armoniosas, es un canino con mucho equilibrio mental, fuerte, ágil y resistente.
Además de grande, lo que es indudable, también tiene un porte elegante, delgado, musculoso; más largo que alto. Veamos con más detalle cómo es el cane corso y el estándar de la raza:
- Origen: Italia.
- Otros nombres: Italian Corso Dog/Chien de cour italien/Italienischer Corso /Hund.
- Colores: los más comunes de aceptación general son el negro y diversos grises, como el claro, el atigrado, el cervato con antifaz gris, cervato con antifaz negro; con manchas blancas en patas, pecho y hocico en negro y tonos grises, como plomo, pizarra, leonado claro, leonado oscuro, atigrado o rojo cervato.
- Cabeza grande y típicamente molosa: ejes longitudinales superiores del cráneo y del hocico, ligeramente convergentes, sin arrugas evidentes.
- Región craneal: grande en los arcos cigomáticos, con anchura igual a la longitud; convexo al frente, plano detrás de la frente hasta el occipucio; surco medial-frontal a la vista, comenzando en el stop, y culminando a la mitad craneal.
- Stop: bien definido, con senos frontales prominentes.
- Región facial: trufa Negra, con una máscara gris la trufa puede tener un color del mismo matiz.
- Nariz grande con amplias fosas nasales bien abiertas: en la misma línea que el puente nasal.
- Hocico: fuerte, cuadrado, visiblemente acortado en el cráneo, la relación hocico/cráneo es de unos 1/2. El delantero del hocico es plana; los laterales son paralelos; el hocico es igual en ancho y largo. Visto de lado es profundo. El perfil de la caña nasal es recto.
- Labios: los superiores, al frente, forman una «U» invertida en su unión; desde el lado cuelgan ligeramente. Tapan la mandíbula inferior y fundamentan el perfil del inferior del hocico.
- Mandíbulas/dientes: estas son grandes, gruesas y curvadas; brevemente prognática pero no mayor a 5 mm; mordida nivelada tolerada.
- Mejillas: la región maceta es evidente, pero no protuberante.
- Ojos: medianos, brevemente sobresalientes, pero no exagerado; forma casi ovoide, bien separados en una posición subfrontal; párpados ajustados; color del iris es oscuro, pero según el color del pelaje; expresión entusiasta y atenta.
- Orejas: triangulares, caídas, de tamaño mediano; con una amplia inserción por encima de los arcos cigomáticos; sin amputar.
- Cuello: fuerte, musculoso, del mismo largo que la cabeza.
- Cuerpo: un poco más largo que su altura a la cruz; de complexión robusta pero no cuadrada; la longitud de la cabeza alcanza el 36% de su altura a la cruz; ágil, fuerte y musculoso sin ser pesado.
- Cruz: pronunciada, elevándose por encima del nivel de la grupa.
- Dorso: recto, muy musculoso y firme.
- Lomo: corto y fuerte.
- Grupa: larga y ancha, ligeramente inclinada.
- Pecho: bien desarrollado hasta alcanzar el nivel del codo.
- Cola: natural, insertada más bien alta; ancha en su base; durante el movimiento la lleva hacia arriba, pero nunca recta o curva.
- Extremidades de miembros anteriores: hombros largos, oblicuos, muy musculosos.
- Brazos: fuertes; antebrazos: rectos, fuerte; de carpo elástico; metacarpo elástico y ligeramente inclinado; patas anteriores, de gato.
- Miembros posteriores: muslos largo, ancho, con la línea posterior convexa; piernas fuertes, no carnosas; rodillas sólida, moderadamente angulada; corvejón moderadamente angulado; metatarso grueso y seco; patas posteriores menos compactas que las anteriores.
- Movimiento: pasos largos, trote extendido; el movimiento preferido es el trote.
- Piel: gruesa, más bien ajustada.
- Clasificación FCI: FCI n.° 343 GRUPO 2; perros tipo pinscher y schnauzer, molosoides, y perros tipo montaña y boyeros suizos; sección 2 Molosoides.
Aspecto
Cuando se observa al maravilloso cane corso en tono negro, se evidencia un bello y brillante pelaje corto apretado y negro; no obstante, en cualquiera de sus matices, bien sea gris, leonado, rojo cervato o atigrado, presenta un cuerpo compacto, robusto, musculoso, fuerte y de potentes extremidades. Su gran cabeza es achatada, ancha y cuadrada con un pronunciado stop.
Alimentación
En vista de lo anterior, es un animal que demanda una dieta exigente, justamente para mantener su robustez, fuerza y actividad. Por tanto el cane corso, consume a diario volúmenes importantes de proteínas de óptima calidad, para mantener impecable sus músculos. Su alimentación, deben contener un aporte adecuado de grasas, para que funcionen adecuadamente sus órganos, así como la salud de su pelaje y piel.
Comportamiento
Respecto a su comportamiento, es preciso reiterar que el cane corso o mastín italiano, es un animal de gran valentía, audaz, leal, orgulloso y equilibrado; con el plus de ser afectuoso y obediente. Su carácter considerablemente sobrio, dócil y sosegado; logrando así el cane corso plantarse como uno de los canes con el más alto nivel de inteligencia conocido.
A pesar de su aspecto temible, es un animal de compañía excelente, con gran apego hacia sus dueños, los niños y ancianos del hogar, con quienes se comporta muy paciente, dócil, cariñoso, fiel y protector. Se mantiene atento ante cualquier evento extraño, por tanto, es muy desconfiado con extraños. En los entrenamientos aprende fácilmente.
Carácter del cane corso
Al momento de establecer el temperamento del cane corso, pudiera decirse en una sola palabra, que resalta la lealtad, haciendo honor a su historia, mostrando con ello su espíritu de legionario. Es una animal lleno de atributos positivos, marcados por su extraordinaria inteligencia, muy agradecido con sus cuidadores a quien siempre busca agradar.
Asimismo, es un can un animal con un carácter activo, fuerte y muy deportista, con un instinto innato de guarda y de protección. Pero al mismo tiempo es dócil y cariñoso; muy paciente y afectuoso con los niños, siendo necesario la supervisión continúa de un adulto, debido a que por su gran tamaño y fuerza, sin querer pudiera lastimar.
Pero esta conducta innata en el cane corso, obedece a sus raíces, ya que fue tomado y criado cientos de años atrás como un eficiente trabajador, además de convivir con las personas y con otros animales, de allí su intrépida conducta.
Aunque no es un can guerrero o que le guste la confrontación, es capaz de hacer cuando la realidad lo demanda, transformándose en una auténtica fiera de defensa para los suyos y a sus propiedades, hasta el extremo, sin posiciones sumisas ante nada ni nadie.
Por el contrario, se comporta como un niño grande, es alegre y divertido, muy activo y dinámico, por cuya cualidad es ideal para las familias activas, siendo el compañero adecuado para realizar muchas actividades físicas, practicando deportes con aquellas familias también deportistas, que les encanta salir al campo y a la calle a ejercitarse. Estas las cualidades se resumen como sigue:
- Energía: nivel alto, posee gran energía y es muy activo.
- Temperamento: alto nivel de fidelidad, dócil y obediente, se dirige vigorosamente cariñoso, valiente y vigilante. Fiero guardián de las cosas, la familia y el ganado, muy ágil y responsable.
- Adaptabilidad: media/alta, capaz de amoldarse a la vida urbana, aunque su ambiente ideal es el campo y áreas abiertas naturales.
- Sociabilidad: media/alta, le encanta su amo, a quien profesa mucho amor, se lleva muy bien con los niños, aunque receloso extraños.
- Salud: buena; por sus dimensiones, tiende a padecer afectaciones articulares.
- Longevidad: puede vivir entre 10 a 12 años, alta comparada con otras razas de este tamaño.
- Utilidad: versátil; principalmente es un canino de guarda y defensa, pero también de compañía.
- Utilización: guarda, protección, compañía, perro policía y de rastreo.
Salud y enfermedades
El cane corso o mastín italiano, en términos generales es un canino saludable, es robusto, rústico con una salud es de hierro, salvo algunas afecciones propias de todas la razas perrunas grandes. De hecho, su esperanza de vida está por encima de otros muchos tipos de canes con similar tamaño.
Ahora, para mantener al cane corso, saludable y equilibrado, física y mentalmente, debe ejercitarse a diario y tener sus controles veterinarios habituales, a fin de mantenerlo libre de parásitos internos o externos, además de todas sus vacunas. Ahora, como bien se dijo, debido a gran su gran talla, eventualmente el cane corso puede padecer de:
- Displasia de cadera o de codo.
- Entropión.
- Ectropión.
- Hiperplasia vaginal en hembras.
En cuanto a la higiene, el cane corso requiere de atención bucal y dental, pues es proclive a presentar enfermedades periodontales; con la consecuente caídas de piezas dentales, lo que trae consigo algunas otras afecciones algo más graves, como afecciones cardíacas, renales o hepáticas.
Debido a su gran inteligencia, se debe estimular al cane corso, ofreciendo juegos que activen y estimulen su mente, además de ejercicios del olfato, y el necesario ejercicio físico. Pese a no ser un can que largue pelo, por lo corto, es bueno y gratificante para el cane corso hacerle un suave cepillado unas 3 veces semanales; a él le encantará, además de retirar el pelo muerto, se estará dando un masaje y afianzando más el vínculo afectivo entre todos.
Cuidados específicos de la raza
El cane corso o mastín italiano, es un can con mucha energía que demanda espacio para jugar y corretear a su voluntad, lo ideal es un jardín. Aunque no por ello hay que omitir los paseos, pues se debe pasear largo rato todos los días, para prolongar su habitual estado saludable.
Asimismo, para optimizar la conducta y la compañía del cane corso, de preferencia su dueño u otra persona indicada, debe mostrar firmeza y autoridad desde el principio frente al carácter un poco dominante del animal. A fines de que aprenda desde temprana edad lo qué está bien y lo qué está mal.
De esta manera la mascota mostrará su estado originario, es decir, su buen carácter, disciplina y equilibrio, logrando así a una mascota obediente, disciplinado y amoroso. Aunque normalmente lo es, es imprescindible reforzar su conducta, en especial si hay niños en casa; se requiere de un cane corso delicado con ellos.
Educación y adiestramiento
Otro aspecto sobre el cane corso, es su educación y adiestramiento adecuado, ello en vista de su fuerza y temperamento, además de como ya se refirió este no es una mascota para todo tipo de personas, pues requiere de mano firme y experimentada para que lo guíe correctamente, con liderazgo natural, consistente y sin estridencias. Sin dejar de lado la energía que debe canalizar este fabuloso animal.
La tarea sobre el adiestramiento de esta raza, en principio es el aspecto social, ya que de no llevarse a cabo correctamente, puede que el can termine convirtiéndose o desarrollando cierta agresividad con los extraños u otros animales.
Su socialización, debe comenzar cuando el cane corso está aún cachorro o con pocas semanas de nacido, siendo el mejor sistema para integrarlo en todas las actividades cotidianas, confrontarlo con diversas simulaciones a los que podría enfrentarse, y acostumbrándose a todo tipo de personas, ruidos, ambientes, entre otros escenarios.
Además, conviene un adiestramiento completo en obediencia, tarea que lleva a cabo un grupo de trabajo o club organizado, preferentemente. Otro de los aspectos que se puede trabajar, es su aptitud natural para la guarda y la defensa, aunque siempre bajo la premisa de potenciar el control sobre sus instintos. Un cane corso bien adiestrado es un perro fiable, por muy temible que resulte su apariencia.
En este mismo sentido, es muy importante agregar, que en esta labor deben comprometerse todos los miembros de la familia, pues de esta forma la jerarquía social del grupo se establece perfectamente, y al cane corso no le queda ninguna duda sobre del lugar que él ocupa dentro de la manada.
Consejos para comprar un Cane Corso
Como siempre decimos desde este portal, pretende captar a un cachorro de cane corso u otra mascota perruna por Internet, supone ciertos riesgos. De tal modo que para tener clara la profesionalidad del criador se recomienda:
- Que sea un criador que conozca todo sobre la raza, que esté presto a seguir la evolución del cachorro cane corso luego de la venta.
- Verificar las recomendaciones de otros criadores o por compradores satisfechos.
- Asegurarse de que sus canes están debidamente registrados en el LOE y portan su pedigree en regla. Pues tramitar el pedigree de un cachorro no es caro, por tanto, no confiar si alega que subirá el costo si lo vende con pedigree.
- Que se ofrezca el historial de salud, físicos, hereditarios, etc del cane corso. A cuyos fines debe hacer entrega de una cartilla veterinaria, chip, vacunas, desparasitaciones y revisiones veterinarias al día.
- Inspeccionar las instalaciones, y observar otros ejemplares o los progenitores, a fin de constatar su estado de salud.
- No adquirir al cachorro de cane corso, si no se ha destetado, pues requieren como mínimo 2 meses junto a su madre antes de ser entregados.
De igual forma, conviene tener presente los cuidados que demandará la futura mascota perruna. El cane corso Italiano, en su atención estética no es nada exigente, en comparación con otras razas, no obstante, no se debe descuidar, debiendo:
- Cepillar su pelaje semanalmente.
- Baño cada 6 u 8 semanas, así como cuidar sus uñas.
- No requiere corte.
- Cuidar sus ojos, orejas y dientes.
- Controles veterinarios frecuentes y vacunas al día.
- El cane corso requiere de mucho ejercicio; no debiendo descuidar sus paseos diarios y el juego.
Antes de comprar un cachorro de cane corso
Ya en este punto, de persistir en la adopción o compra de un cachorro de cane corso, pues es una familia activa, deportista, con carácter, capaz de sobrellevar las exigencias de este extraordinario perrete, no hay que que dejar de lado algunos aspectos , que garanticen tener y exhibir con orgullo y satisfacción a una mascota bien equilibrada y saludable, es preciso saber que desde pequeños deben:
- La sociabilización del cane corso desde que son pequeñines.
- Acostumbrar a diversos ambientes, escenarios, personas y otras mascotas.
- No conviene dejarlo solo o aislado en una casa, pues se corre el riesgo que el can termine transformándose en una mascota agresiva con extraños o con otros perros.
- En sus primeros meses de vida esta raza experimenta un crecimiento espectacular, por lo que hay que vigilar su alimentación y el ejercicio, para que su musculatura y su osamenta no se vean afectadas.
- Con estas consideraciones, ya está listo para tener una de las mejores mascotas de raza grande existente, el cane corso, estará eternamente agradecido, mostrando toda su lealtad, protección y amor. Éxitos!!
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